Que una casa este bien protegida de las radiaciones solares tiene grandes ventajas como un mejor mantenimiento, un ahorro importante en la factura de luz o simplemente beneficios para nuestra salud. En por ello que en este artículo vamos a hablar acerca de cómo evitar el sobrecalentamiento en nuestro hogar.
Lo primero es colocar protectores como parasoles fijos o toldos móviles. Los segundos tienen la gran ventaja de aportar más flexibilidad que los primeros.
Por las ventanas es donde mayores pérdidas energéticas se producen. Un buen aislamiento, como el doble acristalamiento resulta una gran medida para ahorrar y controlar la temperatura de la casa. Aislar el suelo resulta otra gran medida para disminuir el consumo de energía y mantener la casa con el calor óptimo.
Por último, los electrodomésticos también emiten calor. Por tanto, intentar hacer coincidir utilización con las horas del día de menos temperatura atmosférica resulta muy beneficioso para aumentar el confort de nuestro hogar.